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  • br Acknowledgments br Introduction Myelin one of the fundame

    2022-01-14


    Acknowledgments
    Introduction Myelin, one of the fundamental adaptations of vertebrates, is a multilamellar structure deriving from the spiral wrapping around the SB 290157 trifluoroacetate salt of the plasma membrane of myelin forming glia, oligodendrocytes in the central nervous system and Schwann cells (SC) in the peripheral nervous system (PNS). Myelinated fibers are essential to efficiently propagate the nerve impulses along the axons by saltatory conduction. In the PNS, the intimate relationship between axons and SC culminates with the production of the myelin sheath, but it originates early in development. Indeed, a continuous communication between axons and glial cells is critical for a correct development of the nervous system and to ensure permanent and efficient transmission of the electric impulse. Axons provide trophic and mitogenic factors to SCs that in turn participate in normal development, long-term survival of the axon and the formation and the organization of Nodes of Ranvier. Several excellent reviews on SC biology have been recently published addressing the role of axon–SC interaction in development and after injury and I refer the reader to them [1, 2, 3].
    Axonal signals in myelination
    Glial signals in myelination
    Conclusion
    References and recommended reading Papers of particular interest, published within the period of review, have been highlighted as:
    Conflict of interest statement
    Acknowledgments The author is indebted to Stefano Previtali and Maurizio D’Antonio for critical reading of the manuscript and to Luca Massimino for artwork. Studies from the author's laboratory have been supported by grants from FISM, Italy, Telethon Italy, the Italian Minister of Health and NMSS, US. The author apologizes to colleagues whose relevant work could not be cited because of space limitations.
    Introducción La metodología de trabajo ha consistido en la inclusión de artículos publicados entre 2013-2016 en las bases de datos de Pubmed, Medline y en el registro de ensayos clínicos clinicaltrials.gov, así como en la descripción de resultados preliminares de algunas terapias presentados en congresos internacionales de tricología. Los firmantes de la revisión aportan asimismo su experiencia personal acerca de las diferentes terapias.
    Alopecia androgénica
    Alopecia areata En el caso de la AA, podemos resumir las novedades terapéuticas en 2 grupos: a) nuevos datos y formas de utilización de tratamientos clásicos, y b) nuevas terapias.
    Alopecias cicatriciales En relación con la alopecia frontal fibrosante (AFF), la interpretación actual de su etiopatogenia es que se relaciona con un doble mecanismo, autoinmune y hormonal59, 60, 61, justificando que, además del tratamiento con antiinflamatorios (corticoides) para frenar la inflamación autoinmune, se utilicen los fármacos antiandrógenos (finasterida y dutasterida). En los últimos años se han publicado diversos trabajos59, 60, 61, 62, 63, 64 mostrando la potencial utilidad de estos fármacos en AFF, incluyendo un estudio multicéntrico español de 355 pacientes. El mecanismo por el que los antiandrógenos actuarían en la AFF no está del todo aclarado, pero parece que la inhibición de la acción de las hormonas masculinas sobre la raíz folicular ayudaría a viroids estabilizar la enfermedad59, 61. Existen publicaciones en las que se demuestra incluso repoblación con la administración de antiandrógenos. Sin embargo, hay autores que se muestran escépticos con el uso de estos fármacos en AFF. A pesar de que aún no esté definido el mecanismo exacto de actuación, existen evidencias de que hay un factor hormonal responsable de la AFF. Otra importante novedad terapéutica en AFF y liquen plano folicular (LPF) es la utilización del antidiabético oral pioglitazona por su efecto agonista sobre los receptores activados por proliferadores peroxisomales (PPAR-gamma). Estudios recientes consideran que el mal funcionamiento de los PPAR-gamma puede influir en la puesta en marcha de la inflamación en el LPF y la AFF. Se han publicado 4 trabajos67, 68, 69, 70 en los que se ha utilizado la pioglitazona para el tratamiento del LPF y de la AFF, con resultados variables ya que se observó efectividad en el 20-70% y efectos secundarios hasta en el 50%. Márquez y Camacho han realizado un estudio en 68 mujeres con AFF obteniendo resultados favorables en el 64% con el uso de pioglitazona. La percepción de los autores es que la pioglitazona puede ser efectiva en algunos casos, pero tiene un riesgo considerable de intolerancia, principalmente edema de extremidades inferiores y aumento de peso, que en bastantes casos obliga a su retirada.